IDIEM: un proveedor estratégico para la industria minera con 125 años de trayectoria

Dependiente de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, es una institución con reconocida trayectoria y experiencia en procesos constructivos y de materiales, participando en proyectos de gran impacto a lo largo de todo Chile desde las etapas más tempranas, hasta las etapas de cierre del ciclo cuando corresponde la deconstrucción de una obra o faena.

El centro de investigación, desarrollo e innovación de estructuras y materiales, IDIEM, nace en 1898 y su recorrido ha estado unido a una parte clave de la historia de la construcción y de la infraestructura de Chile. “Por eso decimos que somos parte de la historia de Chile, porque hemos estado presentes en los últimos 3 siglos con 125 años de trayectoria”, asegura Ricardo Flores, Gerente de Desarrollo del IDIEM.

La esencia de IDIEM está fundada en ensayos, certificaciones, estudios, soluciones, desarrollos, conocimiento adquirido y confiabilidad. Es también la historia de los materiales y sus transformaciones en el tiempo. IDIEM ha sido un importante contribuyente de calidad, técnica, ingeniería, normativas y mejoras en los materiales de construcción, innovación y progreso.

Con 15 sedes a lo largo de todo Chile, 700 estudios de ingeniería al año, y más de 1.300 servicios, entre ensayos de laboratorio, estudios técnicos, asesorías, inspecciones y peritajes, es un referente y líder indiscutido para industrias como la minería, construcción y energía. Quisimos conocer mejor sus objetivos, planes y próximos desafíos a través de una interesante conversación con Ricardo Flores.

¿Cuáles han sido sus principales logros y/o proyectos más destacables en los últimos años?
A lo largo de nuestra dilatada trayectoria, hemos entregado soluciones integrales para el control de calidad de materiales y acompañamiento para mejorar la seguridad de las operaciones mediante el monitoreo de equipos y estructuras. Además, realizamos peritajes multidisciplinarios de alta complejidad a activos críticos para la continuidad operacional, y apoyamos con nuestra asesoría en el cumplimiento técnico normativo, entre otros servicios.

IDIEM ha sido parte de todos los proyectos relevantes y emblemáticos del país. Resulta difícil pensar en algún proyecto en que IDIEM no haya participado. Ya sea desde la verificación de calidad de los materiales, validando el diseño, acompañando la construcción o bien participando en procesos durante la operación. De esta forma: Hospitales, puentes, puertos, aeropuertos, túneles, observatorios y los grandes proyectos de capex en minería y energía son parte del portafolio IDIEM.

¿Qué tan relevante es para ustedes alcanzar el desarrollo de una economía circular? ¿Cómo aportan específicamente en este ámbito?
El tránsito hacia la economía circular en la construcción es probablemente uno de los mayores retos para la actividad humana en este siglo. Su impacto se relaciona con la capacidad del sector para avanzar no solo hacia un menor uso de recursos naturales, sino también a generar procesos con una huella de carbono significativamente más acotada.

De hecho, la construcción es el rubro que más aporta a la emisión de gases de efecto invernadero. Por eso, se espera que el enfoque de economía circular contribuya a que el sector responda de mejor forma a los desafíos derivados de la crisis climática, aunque para ello hay un nivel inicial: que las construcciones cumplan los objetivos de funcionalidad y seguridad con que fueron creadas. En Chile, tenemos un ecosistema normativo y procesos de verificación de calidad que nos permiten aumentar las exigencias constructivas en temas de productividad, eficiencia y sostenibilidad.

El IDIEM ha contribuido a que el país disponga de normativas y capacidades de ensayo y certificación de materiales. Este conocimiento será fundamental para acompañar un nuevo proceso de evolución: la reutilización de los elementos.

Siempre se pensó que los materiales de la construcción eran de primer uso, pero hoy eso no es suficiente y el sector avanza hacia un enfoque de economía circular. Esto significa estar permanentemente reutilizando esos materiales. El concepto de áridos reciclados o artificiales, la reutilización de relaves, el uso de nuevos elementos para la fabricación de cemento u hormigón van en esa dirección.

Desde esa perspectiva, IDIEM acompaña diversos frentes a nivel regulatorio y de innovación en el país, como la evolución de la normativa, el rol de los materiales, la validación de sus nuevos usos y el testeo de estos.

¿Cuáles son sus principales metas y desafíos en la industria minera para este año?
Para nosotros es muy importante acompañar a la minería en todos sus proyectos y desafíos. Tras este objetivo, hoy podemos mencionar que nuestras principales metas son:

• En CAPEX, continuar participando activamente en los estudios de prefactibilidad y en el control de materiales y procesos durante las etapas de construcción.
• OPEX es nuestro foco principal, donde esperamos potenciar aún más los análisis de riesgo y vulnerabilidad de estructuras. Comenzando con las inspecciones (ensayos no destructivos), levantamiento de condiciones existentes y la determinación de condiciones actuales. Todo ello con el fin de acompañar en la definición de planes de normalización, mantenimiento y priorización en el uso de recursos. También hemos priorizado los estudios de vulnerabilidad y análisis de riesgo contra incendios.
  Asimismo, dentro del Opex, un aspecto importante es la instrumentación y monitoreo de tranques de relaves, para resguardar la seguridad de las operaciones.
• Desde la vereda de la INNOVACIÓN, buscamos acompañar a la minería en el desarrollo de procesos eficientes y productivos, en entornos digitales, y que, además, permitan un desarrollo sostenible. En este sentido, nuestras capacidades nos permiten analizar y testear elementos considerados pasivos y evaluar el uso en la fabricación de nuevos materiales.

¿Cuál es el anhelo del IDIEM para los próximos 10 años?
En IDIEM trabajamos de forma mancomunada con los principales actores del sector minero, haciéndonos cargo conjuntamente de los desafíos técnicos que enfrentan en pos de mantener su posición de liderazgo. Con miras al futuro, queremos continuar siendo -tal como ayer y hoy- un proveedor estratégico de la industria minera, para seguir contribuyendo de manera decisiva y sostenible al progreso económico y social de nuestro país.